Un perro señal cumple con tres roles distintos: compañía, acceso público y señalización de sonidos.
En el rol de compañía, como cualquier otro perro, nos brinda su amistad y facilita las relaciones sociales para lo que se contará con las prioridades y estilo de vida de su futuro dueño. Estos perros estarán dotados de accesibilidad pública, ya que tendrán derecho para entrar prácticamente a cualquier lugar que su usuario quiera ir.
Además, un perro señal está seleccionado y entrenado para alertar, en cualquier momento del día o de la noche, de sonidos que el perro perciba como relevantes para interaccionar con su usuario e indicar el origen o el tipo de sonido.
Además, estamos trabajando conforme a lo descrito en la Ley 3/2017, de 26 de abril, de perros de asistencia para personas con discapacidad en la Comunidad Autónoma de Canarias que impulsó Terapi-Can, para que esos perros con su respectivo chaleco trabajo, puedan acceder a distintos sitios como los perros guía.
Los sonidos de los que puede avisar un perro señal pueden ser: alarmas de incendios, timbres (microondas, horno, puerta, telefonillos, etc.), nombre del usuario (si alguien llama al usuario por su nombre en un determinado lugar), llanto de bebés, alarmas o relojes de cocina, sonidos altos repentinos y cualquier otro sonido que el usuario considere útil en su día a día.
Otra opción es que cualquier persona sorda que tenga un perro de compañía quiera entrenar a su propio perro para que aprenda todo lo posible en señalización de sonidos.